Finalizada la medida de fuerza de este martes por una recomposición salarial, Omar Maturano, confirmó que por el Día del Ferroviario tampoco habrá servicios.
Mientras la medida de fuerza de este martes 28 de enero mantiene paralizados los servicios ferroviarios a nivel nacional entre las 09:00 y las 15:00 horas, el secretario general de La Fraternidad, Omar Maturano, confirmó que los ferroviarios llevarán a cabo un nuevo paro el próximo 1 de marzo en conmemoración del Día del Ferroviario.
Un reclamo histórico y un llamado al diálogo
Maturano declaró ante la prensa que el 1 de marzo “cada conductor y cada ayudante de La Fraternidad no va a prestar servicio”, recordando que en esa fecha de 1948, durante la presidencia de Juan Domingo Perón, se concretó la nacionalización de los ferrocarriles en Argentina. En este contexto, el líder sindical instó al Gobierno a preservar la paz social y atender el reclamo por una recomposición salarial acorde con la inflación del último año, una demanda que, según él, la administración de Javier Milei ha desoído.
“Convoquen a los distintos sectores de la sociedad que están en un verdadero problema. La democracia que consiguieron los trabajadores no se puede rifar, se debe llegar a un diálogo cordial con respeto y humildad. Gobernar es fácil, lo difícil es conducir”, enfatizó Maturano, apelando a la responsabilidad de las autoridades para encontrar una solución consensuada.
Respuesta a las críticas del Gobierno
El paro ferroviario ha generado reacciones en el Gobierno, especialmente del vocero presidencial Manuel Adorni, quien calificó a los gremios ferroviarios de “extorsionadores”. Ante estas críticas, Maturano respondió que la medida de fuerza afecta principalmente a los trabajadores desocupados o suspendidos, y no tanto a quienes ya tienen empleo en el sector ferroviario.
“Cuando haya demoras, cancelaciones o accidentes, también deberemos poner en esos carteles indicadores los nombres de los responsables; por ejemplo, del Ministro de Economía (Luis Caputo), que no dio la plata para reparar los trenes, y de los directivos de las empresas”, manifestó Maturano, en referencia a la cartelería que el Gobierno colocó en estaciones ferroviarias con los nombres y datos personales de los dirigentes sindicales. “Si es así, estoy de acuerdo en que usen mi nombre y me hagan responsable de cualquier medida de fuerza”, concluyó desafiante el líder sindical.
Impacto del paro ferroviario y perspectivas
La medida de fuerza del 1 de marzo se suma a una serie de protestas en el sector ferroviario en demanda de mejoras salariales y condiciones laborales justas. En un contexto económico desafiante, los ferroviarios se mantienen firmes en su postura, mientras el Gobierno intenta contener el conflicto con medidas que, según los gremios, no solucionan el problema de fondo.
El panorama sigue siendo incierto, con un posible endurecimiento de las medidas sindicales si no se alcanza un acuerdo. En este escenario, el sector ferroviario se convierte en un termómetro del descontento social y económico que atraviesa Argentina, con un Gobierno que enfrenta crecientes desafíos en la gestión del conflicto laboral.