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Con la aprobación del nuevo procedimiento por parte de la Secretaría de Energía, se habilita una modalidad que promete mayor agilidad, reducción de costos y beneficios para usuarios y operadores.

La industria de los combustibles en Argentina marca un antes y un después. Con la publicación de la Resolución 147/2025 en el Boletín Oficial, la Secretaría de Energía habilitó formalmente el autodespacho de combustible en las estaciones de servicio, una medida que busca modernizar el sistema de carga, reducir los costos operativos y ofrecer un servicio más eficiente y seguro a los usuarios.

Este cambio, largamente esperado por diversos actores del sector, permitirá que los clientes puedan cargar combustible por cuenta propia, sin la intervención directa de un operario. Una modalidad que ya es común en otros países y que ahora comienza a tomar forma en el mercado argentino.

¿Qué implica el autodespacho de combustible?

El nuevo régimen no es obligatorio, sino que queda a criterio de cada operador implementarlo en sus instalaciones. La medida contempla tres modalidades posibles:

Total: Toda la estación funciona bajo el esquema de autodespacho.
Simultánea: Se combinan zonas de autodespacho con áreas atendidas por personal.
Alternada: Se alterna entre ambos sistemas dependiendo del momento del día.

De esta manera, se busca que la transición sea flexible, adaptándose a las necesidades particulares de cada expendedor y su clientela.

Menos burocracia, más autonomía

Uno de los aspectos más destacados de la resolución es la simplificación del proceso administrativo. Anteriormente, cualquier modificación estructural debía ser autorizada previamente por la Secretaría de Energía. Ahora, el trámite se agiliza: será suficiente con presentar una auditoría de seguridad, documentación técnica, planos de distribución y un certificado de cumplimiento normativo.

“El nuevo procedimiento será más fácil y más rápido debido a que se quitan diferentes trabas burocráticas”, destacaron desde el Gobierno. “Se le brinda más autonomía a los operadores, que ya no tendrán que pedir autorización previa para adaptar la estación al autodespacho”.

Una vez finalizados los trabajos, será la entidad auditora quien presentará la documentación ante la Secretaría, habilitando inmediatamente el funcionamiento de la nueva modalidad. Una decisión que, según estiman desde el sector, podría acelerar la expansión del autodespacho en el país.

Seguridad, un eje clave

A pesar de la automatización, la seguridad sigue siendo una prioridad innegociable. Por eso, la normativa establece requisitos estrictos para garantizar la integridad de los usuarios y trabajadores.

Entre las medidas obligatorias figuran:

Dispositivos de corte de emergencia en los surtidores.
Sistema de disparo automático al completar el abastecimiento del tanque.
Activación manual del surtidor por parte del usuario al comenzar la carga.
Supervisión remota desde una cabina de control, con capacidad para detener el suministro si es necesario.
Presencia de intercomunicadores o señales luminosas/sonoras en la zona de carga para asistencia inmediata.
Mangueras con una longitud máxima de 3,5 metros.
Picos sin traba de gatillo para evitar accidentes.
Materiales y disposición que aseguren la descarga estática del usuario antes de iniciar la operación.

Con estas disposiciones, se pretende que la automatización no implique riesgos adicionales, sino todo lo contrario: un servicio más seguro, incluso en horarios de bajo personal o durante la noche.

Beneficios para todos

Además de modernizar el sistema, el autodespacho de combustible promete una serie de beneficios tanto para los usuarios como para los operadores de estaciones:

Servicio disponible las 24 horas, sin depender de la dotación de personal.
Reducción de costos operativos, al optimizar la estructura de recursos humanos.
Mayor libertad para los estacioneros, que podrán reorganizar su servicio de acuerdo a sus propias condiciones.
Mejores condiciones laborales y de seguridad para los empleados, especialmente en zonas donde las estaciones son blanco de hechos delictivos durante la noche.

Desde el Ejecutivo nacional remarcaron que esta medida representa “una garantía para la integridad física de los trabajadores” y destacaron que “dará continuidad al servicio en horarios donde, hasta ahora, muchas estaciones cerraban por razones de seguridad”.

¿Qué viene ahora?

Si bien la aprobación de la resolución es un paso decisivo, la implementación del autodespacho de combustible será progresiva. Requiere inversiones en infraestructura, capacitación y adecuación de cada establecimiento. No obstante, muchos operadores ya ven con buenos ojos la posibilidad de adoptar este modelo, especialmente aquellos que operan en grandes ciudades o en rutas con alta circulación.

Se abre así un nuevo capítulo para la industria del combustible en Argentina, con foco en la eficiencia, la seguridad y la modernización. Una apuesta por un servicio más ágil, más seguro y más alineado con los estándares internacionales.