En la tarde del domingo, el Lujanero recuperó su mejor versión y venció con autoridad a Atlas, en lo que fue la última fecha de la primera ronda del torneo.

Con goles de Nahuel Icazatti, Julián Ford y Tomás Luján, el Lujanero selló una victoria clave que le permite cerrar esta primera parte del torneo en segunda posición, devolviendo la ilusión a su gente tras la derrota ante Deportivo Paraguayo.

Dominio desde el inicio

Desde el pitazo inicial, el Lujanero mostró decisión y protagonismo. Parado con firmeza en la mitad de la cancha y con intensidad en los metros finales, el local asumió el rol protagónico ante un Atlas que se mostró replegado y sin claridad. La apertura del marcador no tardó en llegar: a los 17 minutos, tras un tiro de esquina ejecutado con precisión por Pedro Alfonso, Leandro Coronel ganó en las alturas y obligó a una reacción exigida del arquero Balbuena. Pero el rebote quedó suelto en el área chica y Nahuel Icazatti, con oportunismo, la empujó para decretar el 1 a 0.

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Con la ventaja parcial, lejos de replegarse, el equipo de Fredes mantuvo la presión alta. Eladio Ramos, desequilibrante por el sector derecho, tuvo una clara para ampliar la diferencia. Por su parte, Atlas intentó inquietar a través de la pelota parada: un tiro libre de Enzo Oviedo bien despejado por el arquero Lescano y una media vuelta de Digangi fueron las aproximaciones más serias del conjunto visitante en la primera parte.

Golpes certeros y efectividad

En el complemento, Atlas salió con otra actitud. Necesitado de puntos, buscó el empate adelantando sus líneas, pero esa estrategia le costó cara. El Lujanero, sólido y efectivo, aprovechó los espacios que dejó el Marrón en el fondo. A los 60 minutos, tras una excelente jugada individual de Eladio Ramos, llegó un centro rasante al segundo palo que Julián Ford conectó con calidad para marcar el 2 a 0.

El golpe fue duro para Atlas, que no logró reponerse anímicamente. Y Luján lo entendió. Apenas unos minutos más tarde, un tiro libre ejecutado por Nicolás Varela se estrelló contra el travesaño, y en el rebote apareció Tomás Luján para apilar defensores y empujar la pelota al fondo de la red, sellando el 3 a 0 y desatando la locura en la tribuna local.

Un cierre con autoridad

Con una ventaja cómoda, el Lujanero bajó el ritmo, pero siguió manejando los hilos del encuentro con inteligencia. A pesar de un descuido defensivo que permitió a Retamoso descontar para Atlas tras quedar mano a mano con Lescano, la historia ya estaba escrita.

El pitazo final llegó con una ovación para el plantel local, que celebró no solo el triunfo, sino también la forma en que lo consiguió. Tras tres partidos sin victorias, Luján volvió a demostrar que tiene con qué pelear arriba y que el bajón fue apenas un tropezón.

Un Lujanero con ambición

El triunfo ante Atlas deja a Luján en una posición inmejorable para encarar la segunda ronda del campeonato. Más allá del resultado, lo más destacable fue la solidez colectiva, la eficacia ofensiva y la recuperación del nivel de jugadores clave como Eladio Ramos, Julián Ford y Tomás Luján.

Con esta actuación, el equipo de Fredes no solo se mete de lleno en la pelea por el campeonato, sino que recupera la confianza y el respaldo de su gente, que volvió a disfrutar de una actuación convincente en su casa. La ilusión está más viva que nunca, y en el club ya sueñan con lo que vendrá.