El lunes en la tarde de Jáuregui tendrá un condimento especial: Flandria volverá a presentarse en el estadio Carlos V con la ilusión de sumar tres puntos que lo acerquen a los puestos de Reducido.
Desde las 15.30, Flandria recibirá a Villa Dálmine por la 15ª fecha del Torneo Clausura de la Primera B, con arbitraje de Gabriel Gutiérrez.
Flandria llega con aire renovado
Después de una racha adversa de siete encuentros sin conocer la victoria, el equipo dirigido por Cacho Sialle logró un desahogo en su última presentación: triunfo 2-0 sobre Fénix, resultado que levantó el ánimo del plantel y devolvió la confianza. Tras cumplir con la fecha libre, Flandria tuvo más días de trabajo para ajustar detalles y planificar un duelo que será clave en sus aspiraciones.
La necesidad es clara: ganar para seguir escalando posiciones y mantener viva la ilusión de meterse en la pelea por un lugar en el Reducido por el segundo ascenso. En un torneo tan parejo como el de la Primera B, cada punto cuenta, y la localía en Jáuregui se transforma en un factor determinante.
Los posibles cambios en el equipo
De cara a este encuentro, el entrenador analiza modificaciones obligadas y tácticas. Una de las novedades sería el regreso de Ariel Morales en reemplazo de Alejandro Nalerio. Además, en el arco, Martín Correa ocupará el lugar de Dante Spitale, quien sufrió una dura lesión en el hombro que lo obligará a pasar por el quirófano.
En el mediocampo también habría una variante: Jonatan Palacio ingresaría por Ramiro De La Riva, ausente de la convocatoria. Estos movimientos buscan darle equilibrio y frescura a un equipo que necesita seguir sumando regularidad en el Clausura.
Villa Dálmine, un rival incómodo
El Viola llega a este compromiso con la intención de cortar su propia irregularidad y hacerse fuerte en una cancha siempre difícil. Si bien ha mostrado altibajos a lo largo del torneo, Villa Dálmine cuenta con jugadores capaces de complicar a cualquier rival y se perfila como un examen exigente para Flandria.