El tiempo estable de las últimas semanas llegará a su fin con el arribo de la tormenta de “Santa Rosa”, que suele producirse a fines de agosto, aunque en este caso su irrupción será antes de lo previsto.
Según los especialistas de Meteored Argentina, todos los modelos coinciden en que el martes 19 de agosto se vivirá un evento significativo de mal tiempo en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y en buena parte de la zona central del país. El fenómeno, asociado a un proceso de ciclogénesis, podría descargar en tan solo 24 horas la lluvia promedio de todo el mes, acompañado de ráfagas intensas de viento.
El inicio de un cambio de tiempo
El fin de semana comenzó con nubosidad en aumento y algunas lluvias aisladas que anticipan la llegada del sistema de baja presión. Para este sábado, los expertos advirtieron que podrían presentarse precipitaciones débiles en sectores del AMBA durante la noche, mientras que el domingo —coincidente con la celebración del Día del Niño— se caracterizará por un cielo muy nublado, neblinas y humedad elevada.
Las condiciones tenderán a desmejorar con el correr de las horas. El lunes se espera que la región amanezca con abundante nubosidad y un marcado descenso de la presión atmosférica. Los vientos, inicialmente leves, comenzarán a incrementarse desde el este, anticipando la llegada de la tormenta.
El martes 19: jornada crítica en Buenos Aires
El día más complejo será el martes, cuando el sistema de baja presión avance desde el Litoral hacia el este bonaerense. Esta situación provocará una caída de la presión superficial a valores por debajo de los 1000 hPa, una señal clara de la formación de un temporal.
La #ciclogénesis 🌀 de la próxima semana dejará fuertes vientos e importantes lluvias 🌧, que superarían en pocas horas lo que llueve normalmente en todo agosto. @ChGaravaglia nos cuenta cuáles serán las ciudades más afectadas 👇https://t.co/xfQM9yTsHa
— Meteored.com.ar (@MeteoredAR) August 16, 2025
Se prevén lluvias intensas, tormentas aisladas y ráfagas de viento que podrían alcanzar entre 45 y 60 km/h, inicialmente del cuadrante este, pero rotando hacia el sur y sudoeste a partir del miércoles 20.
Los acumulados de agua que arrojan los modelos meteorológicos son significativos:
- Entre 50 y 70 mm de precipitaciones en el AMBA durante la jornada del martes.
- Hasta 80 y 100 mm en ciudades del interior bonaerense como Pergamino, Junín, Bragado, Chivilcoy, Luján y Lobos.
En otras palabras, en un solo día podría llover lo mismo que normalmente cae en todo agosto, mes que suele registrar entre 30 y 70 mm en la región centro-este de Argentina.
Una tormenta con nombre propio
La coincidencia temporal con la tradicional Tormenta de Santa Rosa —un fenómeno estacional que los argentinos asocian con la última semana de agosto— hizo que muchos meteorólogos y aficionados al clima denominen a este episodio como una “Santa Rosa anticipada”.
Más allá del simbolismo, lo cierto es que se trata de una tormenta extraordinaria, con capacidad de generar anegamientos en áreas urbanas, caída de ramas y dificultades en la circulación vial debido a la acumulación de agua y los fuertes vientos.
Recomendaciones y alertas oficiales
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitirá en las próximas horas advertencias específicas para la población del AMBA y la provincia de Buenos Aires. Los especialistas recomiendan:
- Evitar circular en la vía pública durante los momentos de mayor intensidad de la tormenta.
- No refugiarse debajo de árboles por el riesgo de caída de ramas.
- Asegurar objetos sueltos en balcones, techos y patios.
- Mantenerse informado a través de los canales oficiales del SMN y Defensa Civil.
Una advertencia de la naturaleza
La llegada de esta tormenta anticipada recuerda la vulnerabilidad de las grandes ciudades frente a fenómenos meteorológicos de escala regional. Con lluvias que podrían duplicar el promedio mensual en solo 24 horas, el martes 19 de agosto quedará marcado como un día de atención máxima para Buenos Aires y gran parte de la región central.
La clave, como destacan los meteorólogos, será mantener la calma y seguir al pie de la letra las alertas oficiales para minimizar los riesgos de un temporal que promete ser histórico.