El diario
El Ministerio de Salud llamó a fortalecer la detección temprana y las medidas de cuidado frente al dengue, en un contexto regional complejo y con aumento estacional del mosquito transmisor en varias provincias.
El Ministerio de Salud de la Nación instó a las jurisdicciones de todo el país a profundizar la vigilancia epidemiológica y el estudio de los casos notificados de dengue, al tiempo que recordó las principales recomendaciones de prevención, especialmente dirigidas a quienes viajen a países con circulación activa del virus.
Según un informe oficial, el inicio de la temporada 2025-2026 presenta en Argentina un escenario de bajo riesgo sanitario, con interrupción sostenida de la transmisión autóctona. Hasta el momento se confirmaron 12 casos, de los cuales cuatro fueron adquiridos en el país y ocho corresponden a personas con antecedentes de viaje al exterior, principalmente a México, Brasil, Sri Lanka, Paraguay y Cuba.
Dengue y un contexto regional que exige atención
Pese al bajo número de casos locales, la cartera sanitaria advirtió que la circulación del virus en varios países de la región y el aumento estacional de la actividad del mosquito Aedes aegypti en distintas provincias obligan a extremar las medidas de prevención. El riesgo principal está asociado a la introducción de casos importados y a la posibilidad de reactivar la transmisión local.
Este escenario cobra mayor relevancia en las próximas semanas, debido al incremento de la movilidad de personas por las Fiestas y el inicio del período vacacional, tanto dentro como fuera del país.
Recomendaciones para quienes viajan
Desde el Ministerio de Salud recomendaron que las personas que viajen a países con circulación viral de dengue y otros arbovirus adopten medidas estrictas para evitar las picaduras de mosquitos. Entre las principales sugerencias se destacan el uso de repelentes, especialmente durante las primeras horas de la mañana y al atardecer, momentos de mayor actividad del vector.
También se aconseja vestir ropa clara que cubra brazos y piernas, utilizar espirales en espacios abiertos y tabletas repelentes en ambientes cerrados, así como proteger camas, cunas y cochecitos con tul o telas mosquiteras.
Síntomas y consulta temprana
Ante la aparición de síntomas compatibles con dengue, como fiebre, dolor muscular, cefalea o malestar general, las autoridades sanitarias remarcan la importancia de consultar de inmediato al sistema de salud y evitar la automedicación, una práctica que puede agravar el cuadro clínico.
La detección temprana es clave no solo para el tratamiento adecuado de la persona afectada, sino también para cortar la cadena de transmisión.
El Ministerio de Salud reiteró la necesidad de sostener en el tiempo las acciones de descacharrado y control ambiental. Es fundamental eliminar objetos en desuso que puedan acumular agua, vaciar, tapar o renovar periódicamente el agua de recipientes que no puedan desecharse, y destapar canaletas y desagües.
Además, se recomendó prestar especial atención antes de viajar o ausentarse varios días del hogar, para evitar que durante ese período se generen criaderos del mosquito transmisor.
Situación en América y vigilancia en Argentina
Actualmente, 16 países del continente registran circulación activa de dengue. Brasil concentra el mayor número absoluto de casos, seguido por México, Colombia, Guatemala, Perú, Honduras, Costa Rica y Ecuador. En varios de estos países se detecta la circulación simultánea de los cuatro serotipos del virus.
En Argentina, durante 2025 se registró circulación autóctona de los serotipos DENV-1 y DENV-2. La detección reciente de dos casos de DENV-3 en personas con antecedentes de viaje refuerza la necesidad de mantener una vigilancia epidemiológica oportuna, que incluya la serotipificación y el uso de métodos de diagnóstico directo.
En este marco, el Ministerio de Salud de la Nación, junto al Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas “Dr. Julio I. Maiztegui” (ANLIS Malbrán), inició un trabajo de acompañamiento a las jurisdicciones para fortalecer la detección precoz y el diagnóstico oportuno de casos.
La estrategia incluye el desarrollo de un sistema federal de vigilancia y la provisión de insumos, con el objetivo de anticiparse a posibles brotes y reducir el impacto del dengue en la población.
