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La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) ha expresado un contundente rechazo al proyecto de Ley de Góndolas presentado en el Senado bonaerense.
La CAC advierte que, de ser aprobado, este proyecto podría perturbar significativamente la operativa de numerosas empresas, incrementando sus costos y, en consecuencia, perjudicando al consumidor final.
En un comunicado oficial, la CAC, con una historia de casi 100 años promoviendo los principios de iniciativa privada y libertad económica, subraya que estos valores son fundamentales para el progreso, una lección respaldada tanto por la experiencia internacional como por la propia historia argentina.
El rechazo a la Ley de Góndolas no es nuevo para la CAC, que meses atrás celebró su derogación a nivel nacional. Ahora, observa con preocupación el avance del proyecto en la provincia de Buenos Aires. No obstante, la entidad reconoce que comparte algunos de los objetivos planteados en la iniciativa, como evitar prácticas distorsivas, promover el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas (pymes) y alcanzar precios competitivos. Sin embargo, la herramienta propuesta es vista como incorrecta y contraproducente. Según la CAC, una injerencia excesiva en las relaciones comerciales podría derivar en escasez de productos y aumento de precios, lo cual afectaría tanto a empresas como a consumidores.
Además, la CAC argumenta que el proyecto vulnera la libertad de comercio consagrada en la Constitución Nacional. Aunque reconoce que no es un derecho absoluto, considera abusivo que se impongan condiciones de comercialización únicamente a algunos actores del mercado de consumo masivo.
La historia argentina, señala la CAC, está llena de políticas que, a pesar de tener fines loables, han generado severos daños. Las regulaciones omnipresentes y excesivas, algunas de las cuales son tan complejas que resultan impracticables, representan un lastre significativo para las empresas de todos los tamaños. Estas regulaciones limitan las posibilidades de crecimiento y, en muchos casos, ponen en riesgo la viabilidad de las empresas.
El comunicado también destaca las implicancias adversas en el ámbito laboral y en los indicadores sociales. La CAC sostiene que sin un sector privado pujante no es posible crear empleo genuino ni generar la riqueza necesaria para superar los alarmantes niveles de postergación y pobreza que enfrenta el país.
La controversia en torno a la Ley de Góndolas refleja una tensión constante entre la necesidad de regular el comercio para evitar abusos y la importancia de mantener un entorno de negocios flexible y libre. Mientras el debate continúa, el sector comercial observa con atención, consciente de que las decisiones que se tomen tendrán un impacto profundo en la economía y en la vida diaria de los argentinos.
