El Lujanero venció a Sportivo Barracas en cancha de Almagro y se mantiene a un punto del líder Camioneros en la zona B de la Primera C.
Tras la victoria sobre Ballester por 3 a 1, el Lujanero volvió a mostrar su mejor versión y derrotó como visitante a Sportivo Barracas, en el estadio de Almagro, por una nueva fecha del Torneo de la Primera División C.
Un arranque inteligente y efectivo del Lujanero
Desde el pitazo inicial, el Lujanero dejó en claro que no fue a especular. Si bien Sportivo Barracas tuvo la primera situación clara del encuentro con un tiro de esquina que casi conecta Mauro Romay, fue el conjunto de la Basílica el que golpeó primero.
La apertura del marcador llegó tras un grosero error en la salida del local: una mala entrega en el fondo derivó en un mano a mano letal para Brandon Arriola, que no perdonó. El delantero definió cruzado ante la salida de Blengio para el 1 a 0 y desató el festejo visitante.
Lejos de conformarse, Luján fue por más. Con presión alta, concentración defensiva y precisión en los pases, dominó gran parte de la primera mitad. Y el premio llegó antes del descanso: Facundo Rojas asistió con clase a Eladio Ramos, quien con un toque sutil por encima del arquero marcó el 2 a 0 y encaminó una victoria fundamental.
Un segundo tiempo cargado de tensión
La segunda parte tuvo otro ritmo. Sportivo Barracas, obligado por el resultado, salió con mayor agresividad. Sin embargo, fue nuevamente Arriola quien estuvo cerca del tercero para Luján, pero en esta ocasión el arquero le ganó el duelo al delantero.
El descuento del Arrabalero llegó de forma inesperada: un tiro de esquina mal resuelto terminó rebotando en Diego Molina, que en su intento de despejar terminó venciendo su propio arco. Ese gol le dio vida al local y cambió el clima del partido.
Desde entonces, lo que era un encuentro táctico pasó a ser una verdadera batalla. Las fricciones se multiplicaron, las protestas se adueñaron del campo y el juego se volvió cortado. En ese contexto caliente, ambos equipos sufrieron expulsiones: Rebussone por el Lujanero y Duna por Sportivo Barracas, dejando a ambos conjuntos con diez jugadores en el tramo final.
Victoria con sabor a final
Luján resistió con inteligencia y corazón. Supo cómo jugar los últimos minutos, sin desesperarse y sin darle espacios al rival. Cuando el árbitro marcó el final, los jugadores celebraron como si fuera una final. Y no era para menos.
Este triunfo tiene un valor enorme para el Lujanero. No solo por los tres puntos, sino también por la manera en que los consiguió: con carácter, juego colectivo y un temple que lo mantiene como uno de los grandes protagonistas del certamen.
La lucha por la cima sigue al rojo vivo
Con esta victoria, el equipo de la Basílica suma 35 unidades y sigue a tan solo un punto de Camioneros, que también ganó su partido. La competencia por el primer puesto se vuelve cada vez más cerrada, y Luján está demostrando que tiene con qué soñar.
En la próxima jornada, el Lujanero volverá a jugar en casa, donde recibirá a Estrella del Sur, por la fecha 18.