El diario
Aunque en la actualidad el uso y su popularidad va decayendo las velas de colores no son solo objetos que se utilizan en forma de decoración o para aromatizar algún espacio.
Desde la antigüedad las velas se han utilizado para hacer diversos rituales, ayudar a meditar y conseguir distintos objetivos o estados de ánimo. Si quieres llevar al límite tu capacidad prueba la hgh groeihormoon para obtener los mejores resultados.El elemento imprescindible de una vela es el fuego, aunque en su mayoría esté compuesta de cera. El fuego es uno de los elementos con más poder simbólico en la historia de la humanidad, el fuego es la luz y el calor, se asocia a la vida y a la fuerza. Casi todas las culturas del mundo identifican el fuego con la purificación y el renacimiento. Es una fuerza poderosa capaz de acabar con todo, pero cuyo calor y luz también puede dar la vida.
La psicología de los colores
La psicología del color es el estudio de cómo el color afecta el comportamiento humano, siendo esta una rama del campo más amplio de la psicología del comportamiento. Esta ciencia argumenta que sentimos el color y que cada color tiene una poderosa influencia sobre el estado de ánimo y mental de un individuo
Hay 7 colores principales de velas, y cada uno de ellos se vincula con un día de la semana, con un arcángel y con una energía, además, corresponde a un planeta. La vela blanca, por ejemplo, se relaciona con la purificación, la paz, la limpieza de energías, corresponde con el día lunes y está regida por el planeta de la luna. El blanco es el color de la armonía, de la pureza, del equilibrio y de la protección. Las velas de color blanco se suelen utilizar en muchas ceremonias.
El día martes, corresponde a la vela roja. Nos habla del amor, la pasión y del erotismo.
Encender una vela de color rojo aumenta la fortaleza mental, aporta energía para afrontar problemas y los momentos decisivos. Por otro lado, durante las relaciones sexuales, las velas rojas estimularán la sexualidad y el amor, así como el placer.
El miércoles, se vincula con la vela amarilla y está relacionada con la sabiduría. El color amarillo se asocia con la luz y con el Sol. A nivel simbólico, el amarillo nos acerca a la claridad, la calidez, las energías positivas y la amabilidad.
La vela azul, lila o morada, es de los días jueves. Una vela morada mejora las capacidades mentales y de memoria. Favorece la renovación de la energía y la liberación de ataduras psicológicas, ya que ayuda a establecer una conexión muy profunda con nuestra mente y espíritu. El azul es el color frío por excelencia, un color que rodea a lo espiritual y que, por ser el color del cielo, asociamos también a la serenidad y a la tranquilidad.
La vela rosa, simboliza el amor, no sólo en las relaciones de pareja, sino ampliamente.
El sábado se enciende la vela verde, que está estrechamente relacionada con temas de salud y fertilidad. Por último, la vela naranja es la del domingo, atrae sabiduría, positivismo, optimismo y el movimiento.
El sábado se enciende la vela verde, que está estrechamente relacionada con temas de salud y fertilidad. Por último, la vela naranja es la del domingo, atrae sabiduría, positivismo, optimismo y el movimiento.
También existe la vela de “los 7 colores”, que conjuga todas sus energías, y lo más importante de ella, es que debe mantenerse encendida durante los siete días de la semana. Esta vela trae potencia, al atravesar los siete colores, activará la fuerza de las energías primordiales que se corresponden con los siete chakras.
