Luján Rugby Club perdió 47 a 45 ante Don Bosco como visitante, en un encuentro cambiante. Fue su novena caída consecutiva en la Primera B de la URBA, aunque rescató un punto bonus.
Luján Rugby Club, que venía de perder contra San Fernando por 50 a 0, visitó este sábado por la tarde a Don Bosco, quien venía de ser derrotado por C.U. de Quilmes 21 a 19.
En un partido vibrante de principio a fin, Luján RC cayó ajustadamente por 47 a 45 frente a Don Bosco, en condición de visitante, por una nueva jornada de la Primera B de la URBA. En un duelo directo entre dos equipos que luchan por no perder la categoría, los lujanenses dejaron todo, llegaron a estar dos veces en ventaja, pero terminaron masticando bronca por una derrota que duele, y mucho.
Con esta nueva caída —la novena de forma consecutiva—, el panorama sigue siendo muy complicado para el conjunto dirigido por Marcenaro, que no puede salir del fondo de la tabla. A pesar de sumar un valioso punto bonus defensivo, el equipo de nuestra ciudad sigue sin encontrar el rumbo ni cortar una racha negativa que se extiende más allá de lo anímico.
Primer tiempo de alto vuelo y dominio parcial de Luján
Desde el pitazo inicial quedó claro que sería un encuentro abierto y de alto ritmo. Don Bosco golpeó primero con un try convertido para el 7-0, pero Luján reaccionó rápido con una conquista de Francisco De La Riva, seguida por la conversión efectiva de Magalhaes para empatar el marcador.
El local volvió a pasar al frente con un penal (10-7), pero fue entonces cuando el conjunto celeste, blanco y azul mostró su mejor cara: dos tries, obra de De La Riva y Gidekel, ambos bien acompañados por otra conversión de Magalhaes, dieron vuelta la historia para un esperanzador 19 a 10.
El impulso no se detuvo. Santiago Grecco rompió líneas y apoyó otro try que, con la puntería intacta de Magalhaes, estiró la diferencia a 24-10. Pero Don Bosco no se rindió y respondió con un try convertido, acercándose 24 a 17.
En lo que fue la mejor jugada colectiva de la tarde, Diego Suárez coronó una gran maniobra con un try que parecía encaminar el triunfo visitante. Magalhaes volvió a sumar desde el tee, dejando el parcial en 33 a 17. Sin embargo, antes del descanso, el anfitrión descontó con un penal para cerrar una primera mitad frenética en 33 a 20 a favor de Luján.
El segundo tiempo, pura adrenalina y final para el infarto
La segunda parte comenzó de forma desfavorable para el LRC. Don Bosco salió con decisión y, con un penal más un try convertido, se puso peligrosamente a tiro: 33 a 30. La tensión se adueñó del campo, pero el equipo de Marcenaro volvió a responder con coraje.
Francisco De La Riva, en una tarde soñada, apoyó su tercer try personal. Nuevamente Magalhaes sumó de a dos y puso el 40 a 30. Sin embargo, la ventaja volvió a esfumarse. El local capitalizó un error y llegó al try, achicando la distancia a solo tres puntos. Y poco después, en otra jugada de manual, dio vuelta el resultado: 44 a 40.
Pero este Luján, golpeado pero jamás vencido, se aferró a la esperanza. En una ráfaga ofensiva, Francisco Cava vulneró el ingoal para devolverle la ventaja al visitante por 45 a 44. Parecía que esta vez sí, que la tan ansiada victoria iba a llegar. Sin embargo, en una de las últimas acciones del partido, Don Bosco forzó un penal a su favor. El pateador local no falló y decretó el 47 a 45 final, para lamento de un Luján que mereció más.
Balance, tabla y lo que viene
Aunque Luján Rugby Club sumó un punto bonus defensivo, la realidad es que la situación en la tabla sigue siendo preocupante. Con nueve derrotas consecutivas y aún último en las posiciones, el equipo necesita una reacción urgente, tanto en resultados como en lo anímico, si pretende mantener la categoría.
El próximo compromiso será nuevamente clave: recibirán a San Martín con la obligación de ganar para cortar la mala racha y recuperar la confianza.