Este sábado, el Luján Rugby Club afrontará un compromiso decisivo en la 18° fecha del torneo de Primera B de la URBA, cuando reciba en su cancha del barrio La Loma a Mariano Moreno.
El encuentro del plantel superior comenzará a las 15:30 y promete ser de alta intensidad, en un contexto donde cada punto es vital para la lucha por evitar el descenso.
El conjunto Azul, Celeste y Blanco llega tras una derrota ajustada ante Liceo Naval, uno de los candidatos del certamen. Pese al resultado adverso, el rendimiento dejó un saldo positivo: solidez táctica, entrega física y un juego ordenado que le permitió sumar un valioso punto bonus defensivo. Ese rendimiento fue una clara muestra de que el equipo dirigido por Marcenaro no se rinde y mantiene viva la ilusión de salir del fondo de la tabla.
Actualidad del rugby lujanense
Actualmente, Luján Rugby Club se ubica en zona de descenso con 18 puntos. La necesidad de ganar se vuelve urgente, ya que cada fecha que pasa representa una oportunidad menos para revertir la situación. El partido frente a Mariano Moreno se presenta como una ocasión inmejorable para recuperar la confianza, sumar de a cuatro y encarar el tramo final del campeonato con más oxígeno en la tabla de posiciones.
El plantel ha mostrado, en sus últimos compromisos, una buena rotación de jugadores y un crecimiento en la disciplina defensiva. Si logra combinar esa solidez con mayor efectividad en ataque, podría dar un golpe clave frente a un rival que también busca consolidar su posición en el torneo.
La cita del sábado no solo será importante para los protagonistas dentro del campo, sino también para la hinchada, que tendrá la oportunidad de alentar desde temprano y empujar al equipo en un momento determinante de la temporada. En un deporte como el rugby, donde la fortaleza mental y el trabajo colectivo son esenciales, el apoyo del público puede ser tan influyente como una buena jugada.
En definitiva, el enfrentamiento entre Luján Rugby Club y Mariano Moreno será mucho más que un partido: será una batalla por la permanencia, una prueba de carácter y un capítulo más en la historia de un club que, con garra y convicción, quiere seguir escribiendo su futuro en la Primera B de la URBA.