El boxeo argentino tiene un nuevo protagonista en escena. Nahuel Pereyra, oriundo del barrio San Cayetano de Luján, se coronó como el campeón argentino de la categoría Súper Ligero.
Tras vencer por nocaut técnico a Lautaro Flores en un emocionante combate celebrado en la Federación Argentina de Box (FAB) el lujanense se quedó con la velada.
Una oportunidad única que Pereyra no dejó escapar
Con 32 años, Nahuel Pereyra finalmente tuvo su gran oportunidad y supo capitalizarla. Tras varios años de idas y vueltas en el boxeo, el lujanense encontró en Bachi Felice el guía necesario para reencontrarse con su pasión por los guantes. Este sábado por la noche, en un enfrentamiento pautado a cuatro asaltos, Pereyra no solo demostró su talento sino también su determinación por alcanzar la cima.
El combate comenzó con Pereyra adueñándose del centro del ring desde el primer asalto. Sus movimientos precisos y contundentes dejaron en evidencia las dudas de su oponente, Lautaro Flores. Fue en el tercer round cuando el púgil lujanense conectó un golpe demoledor en la quijada de Flores, quien cayó a la lona sin poder reincorporarse antes de la cuenta definitiva de la árbitra.
De las tortillas asadas al cuadrilátero
La historia de Nahuel Pereyra es una muestra de esfuerzo y superación. Durante años, equilibró su tiempo entre la venta de tortillas asadas y tortas fritas para sustentar su entrenamiento en el Club Rivadavia. Ahora, con el cinturón de campeón en su poder, su sueño de competir a nivel internacional está más vivo que nunca.
“Es un honor llevar este cinturón para mi barrio y mi familia. Esto es solo el comienzo. Quiero seguir creciendo y representar a mi país en el exterior”, declaró Pereyra emocionado tras su victoria.
Un futuro prometedor
El triunfo de Nahuel Pereyra no solo lo coloca en el radar del boxeo nacional, sino que también abre las puertas para futuras oportunidades en el ámbito internacional. Su dedicación, humildad y fortaleza lo convierten en una figura a seguir dentro del deporte argentino.
Con esta victoria, Pereyra se perfila como una promesa que podría llevar el nombre de Luján y de Argentina a lo más alto del boxeo mundial. Salud al campeón, que el sueño recién comienza.